El Gobierno continúa haciendo esfuerzos por desacelerar la inflación. En mayo, el evento canónico fue la baja de combustibles en torno al 4,5% por parte de YPF, que redundó en una réplica de sus competidoras (disminuyeron los valores entre un 2% y un 8%).

En esa línea, la inflación de la primera semana de mayo se desaceleró con un componente importante de alimentos, aunque las empresas alimenticias no descartan aplicar ajustes de precios a fin de mes.

La inflación semanal de la consultora Equilibra fue de 0,9%, la menor para una primera semana de mes. “Los esfuerzos del Gobierno por aminorar el traslado a precios post salida del cepo estarían dando frutos“, resaltaron. Es que, en abril la divisa oficial subió 9% y este avance hizo que varias listas de precios llegaran a los supermercados con aumentos, que las grandes cadenas decidieron no convalidar.

A este dato, también colaboró la baja de las naftas con un impacto de -0,2 puntos porcentuales (p.p.), así como también el acuerdo con las prepagas y la postergación de los aumentos de tarifas energéticas, que se elevan por estacionalidad en el costo de producción, señalaron desde Equilibra y destacaron que estos esfuerzos hicieron que los Regulados trepen solo 0,8% en la semana.

Para el mes de mayo, la consultora EcoGo proyectó que la variación de precios se ubicaría en torno al 2,3%. Pese a que el dato aún es preliminar y está sujeto a modificaciones, explicaron que la estabilización del tipo de cambio, por debajo del centro de las bandas tras la salida del cepo, así como el menor impacto de los estacionales como frutas y verduras, y la baja de combustibles, podrían contribuir a que el IPC vuelva a perforar el 3%.

Fuente: Ámbito.com