De acuerdo a un informe del Centro de Estudios de la Educación Argentina, nuestro país necesita duplicar la cantidad de graduados de las carreras científicas y tecnológicas, según las estadísticas de egresados que evidencian otros países en esas áreas.

En Argentina la graduación en las carreras científicas y tecnológicas es apenas el 14% del total, mientras que en países como Corea y Finlandia estos graduados representan más del doble: son el 30% del total

Por otra parte, según estimaciones del Consejo Federal de Decanos de Ingeniería, en el país se gradúan 6.500 ingenieros cada año, una cifra inferior a la de países como Brasil y China.

En tanto, las carreras de Derecho, Administración, Medicina y Contabilidad encabezan desde hace más de diez años el ranking de las más elegidas. De acuerdo con los últimos datos del Ministerio de Educación, relevados por el diario Clarín, las ciencias sociales y las humanidades suman el 58% de los graduados universitarios.

Solo Economía y Administración tienen más de 20 mil egresados por año, una cifra diez veces más alta que el total de egresados de ciencias básicas (Biología, Física, Matemática y Química), que apenas suman unos 2.500 graduados anuales, indicó el matutino.

Más aún, la cantidad de profesionales de las carreras consideradas prioritarias para el desarrollo del país por el gobierno nacional, no se incrementan pese a la demanda laboral que se exhibe hoy para ingenierías, ciencias exactas y las carreras asociadas con las nuevas tecnologías.

Entre las ingenierías, las ramas Eléctrica, Mecánica, Textil, Naval y Petróleo están entre las más solicitadas, según relevó Clarín. “Son los ingenieros los que están capacitados para dar respuesta a desafíos como el cambio climático global, el desarrollo y la creación de riqueza y la provisión de energía, los problemas de vivienda, transportes y comunicaciones”, explicó al matutino Catalina Nosiglia, secretaria de Asuntos Académicos de la UBA.

“También las carreras de Agronomía son de una importancia vital para nuestro país, ya que implican el conocimiento de saberes relacionados con los recursos naturales”, añadió.

Sobre la falta de estudiantes de las carreras científicas, desde la Universidad Tecnológica Nacional (UTN) señalaron a Clarín que hay tres causas principales: “Primero, la percepción de los jóvenes que se trata de carreras difíciles. Segundo, que efectivamente la carrera es ardua para aquellos que no han transitado un buen estudio secundario”.

Por último, “como estas carreras tienen una salida laboral del 100%, en los últimos años hay una gran deserción de alumnos que son captados por el mercado de trabajo y no llegan a recibirse”, describió a Clarín Guillermo Oliveto, decano de la sede porteña de la UTN.

Alicia Giomi, subdirectora de operaciones de Manpower group Argentina, destacó que a la hora de elegir la carrera “resulta clave que los egresados de nivel medio realicen un adecuado proceso de orientación vocacional, profundizando en sus intereses y motivaciones personales, pero también indagando en qué es lo que necesita el mercado”, apuntó.

“En Estados Unidos y en Europa existe una conciencia muy clara sobre qué es conveniente estudiar y cómo viene el futuro en materia de trabajo y necesidades del mercado. Acá el joven estudia lo que le gusta y la posibilidad laboral no tiene peso en esa decisión”, coincidió Alex Fainstein, vicedirector del área de Ciencias del Instituto Balseiro.