Una tormenta sin precedentes azotó este viernes a una zona del norte de Buenos Aires y como consecuencia hubo inundaciones, calles anegadas y autos que terminaron “flotando” producto del arrastre del agua. La zona más afectada fue Zárate pero también hubo situaciones caóticas en Campana, Exaltación de la Cruz, Capitán Sarmiento y San Antonio de Areco. Las lluvias superaron los 300 milímetros en menos de 24 horas, generando cortes de ruta, evacuaciones y la paralización casi total del distrito.
El intendente Marcelo Matzkin activó el Comité de Crisis a las 12:35 y firmó el decreto municipal N.º 235 para suspender todas las actividades públicas y masivas durante el fin de semana, además de prohibir el tránsito de transporte pesado por seguridad.
Además advirtió que hay barrios periféricos con hasta dos metros de agua, lo que obligó a activar el Comité de Crisis y evacuar a cientos de personas. “Hay una zona urbana donde se puede hacer vida normal, y otra periférica donde el agua tapó todo”, graficó en diálogo con el canal A24.
Matzkin relató que firmó el decreto de suspensión de actividades públicas cuando ya se habían acumulado 150 mm de agua caída. “Advertimos a los vecinos de San Javier que evacuaran, y por suerte lo hicieron. Ese barrio hoy está completamente bajo el agua”, aseguró.
El jefe comunal enfatizó la magnitud del fenómeno climático. “Esta situación es atípica, con una caída de agua que llega casi a los 280 mm, lo que equivale a más de lo que llueve en todo un año en la zona”, señaló antes que en la madrugada el registro superara los 300 mm.
Asistencia federal en la zona
Ante la magnitud de las inundaciones, fuerzas federales fueron desplegadas en la región para colaborar con tareas de evacuación y asistencia a los damnificados.
En paralelo, municipios como Zárate y Exaltación de la Cruz activaron comités de crisis, suspendieron actividades públicas y pidieron a los vecinos no salir de sus casas salvo en caso de extrema necesidad.