En una placa cargada de tensión y sorpresas, el público tomó partido y decidió la salida de una de las jugadoras más polémicas del reality.
La noche del domingo en Gran Hermano se vivió con máxima expectativa y nerviosismo. En una gala con una placa numerosa, donde varios participantes quedaron expuestos a la decisión del público, fue Catalina quien finalmente tuvo que abandonar la casa más famosa del país, tras enfrentar un mano a mano con Luz.
La primera gran sorpresa de la noche fue la salvación de Eugenia, quien salió rápidamente de placa, descolocando a más de uno dentro y fuera del reality. En cambio, Gabriela fue la última en quedar fuera de peligro, lo que dejó a Catalina y Luz frente a frente, en una definición que mantuvo en vilo a los seguidores del programa.
Cerca de la medianoche, Santiago del Moro abrió el sobre con los resultados del voto telefónico, que confirmó lo que muchas encuestas anticipaban desde temprano: Catalina fue la más votada con un alto porcentaje de votos negativos y tuvo que dejar la competencia.
La salida de Catalina marca un nuevo capítulo dentro del juego. La participante había ingresado a la casa en reemplazo de Juliana “Furia”, a través de la llamada “puerta giratoria”, y desde entonces protagonizó varios momentos controversiales. Su actitud dentro del juego la llevó a recibir una dura sanción por parte de la producción, que anuló su liderazgo de la semana y la dejó automáticamente en placa.
A pesar de esa sanción, la jugadora se fue con un premio inesperado: una moto que ganó durante una de las pruebas. Sin embargo, no logró revertir la percepción del público y terminó siendo eliminada.
Con su salida, el llamado “Tridente” —integrado por Santiago “Tato”, Lucía y Luz— consolidó su fuerza dentro del juego, celebrando la permanencia de la joven en la casa. Una vez más, el voto popular decidió y el reality dio un nuevo giro que promete sacudir la convivencia en los próximos días.