Mucho se habló de la relación que unía al ex candidato presidencial Daniel Scioli con su mujer Karina Rabolini. Fue a comienzos del 2016 cuando el político confirmó que la relación entre ambos estaba pasando por una crisis.
A pocos meses del fin de la campaña, la ex modelo cerró sus cuentas en las redes sociales, cambió su teléfono y desapareció de los flashes. Hoy, refugiada en su familia, y su empresa habría vuelto a encontrar el amor.
Según publicó Diario Perfil, se trata de Ignacio Castro Cranwell, quien se desempeñó como vocero de Scioli en los últimos años. El amor habría nacido en medio de los largos recorridos por el país para contribuir a la campaña presidencial.

Castro Cranwell dejó su casa en el barrio privado de Tigre, San Isidro Labrador, una vivienda que en la actualidad vive su ex mujer junto a sus hijos, y se mudó al barrio Senderos de Nordelta. Allí Karina pasa algunos días, e incluso, se la ve una vez por semana haciendo las compras en el supermercado Jumbo de este exclusivo barrio privado. El resto de los días, los pasa entre la casa de su hermana Andrea y la de sus padres en Capital Federal y Villa La Ñata, en donde visita a los que considera sus otros dos amores: sus perros Mare y Nonito.
El perfil bajo de Karina Rabolini también obedece al trabajo actual de Castro Cranwell, porque su romance no le impidió dar un salto al macrismo. Felipe Miguel, su cuñado (está casado con su hermana Sofía) y es jefe de Gabinete de Horacio Rodríguez Larreta, consiguió convertirlo en Director de Relaciones Institucionales del Ministerio de Educación porteño a cargo de Soledad Acuña. Sus actuales jefes no ven con simpatía que su romance escale en los medios.