En una nueva gala de nominación cargada de tensión, una de las jugadoras más destacadas de la casa, Sandra Priore, protagonizó un momento que no pasó desapercibido.
Este miércoles, los participantes de Gran Hermano pasaron por el confesionario para nominar, y como es habitual, aprovecharon el pasillo para enviar saludos y mensajes a sus seguidores. Sin embargo, en medio de ese contexto habitual, Sandra compartió una fuerte revelación que dejó en claro su determinación en el juego.
La jugadora contó que recibió un grito del exterior relacionado con una supuesta infidelidad de su marido, ocurrida mientras ella se encuentra dentro de la casa. Lejos de desmoronarse, Sandra sostuvo que el comentario no la afectó negativamente, sino que la fortaleció.
“Amor, te amo. A toda la gente que viene a gritarme por mi familia, no me van a mover, al menos que la gente me saque”, expresó de forma contundente.
Reconocida por su fuerte carácter, Sandra reafirmó que se encuentra más firme que nunca. “Nada ni nadie me va a sacar de mi eje”, aseguró, dejando en claro su compromiso con el juego y su deseo de continuar pese a cualquier situación externa.