Andrea Acosta es estilista y lleva casi dos décadas dedicada con amor y compromiso a su profesión. Comenzó en reconocidas peluquerías de San Juan y, con el tiempo, fue ganando experiencia que la llevó a trabajar en Buenos Aires, donde también abrió su propio salón.
Hace poco más de un año, volvió a su provincia natal y decidió apostar fuerte: instaló su propia peluquería en Chimbas, donde recibe a clientas que la siguen desde hace años y que fueron un gran sostén en su camino.
Pero el pasado fin de semana, una propuesta inesperada le cambió la rutina y le dejó una marca imborrable en su carrera: fue convocada por los productores de una obra teatral para peinar a Gimena Accardi, la reconocida actriz que se presentó en la provincia.
“Me dijeron que el domingo iba a trabajar, que confiaban en mí por mi trabajo. Y ahí me contaron que era para peinarla a ella (Gimena Accardi). Para mí fue un privilegio enorme”, expresó Andrea en diálogo con Diario La Provincia SJ.
La experiencia se dio en el camarín del teatro, momentos antes de que Accardi saliera a escena. Según relató, la actriz fue amable, sencilla y muy profesional.
“Me dijo ‘haceme un brushing con movimiento, con volumen… vos hacé lo tuyo’. Cualquier otra estrella te da pautas, pero ella me dejó trabajar tranquilamente. Fue muy natural, muy ella”, destacó emocionada.
Durante el encuentro, Andrea aprovechó para charlar con la actriz y conocerla un poco más. Gimena le contó que ya había estado en San Juan en otras oportunidades, pero que nunca había podido recorrer con tranquilidad. Esta vez tampoco tuvo suerte con el clima, ya que el fin de semana estuvo inestable, con lluvias y viento.
La sanjuanina aseguró que recibió elogios por su trabajo, lo que representó una gran emoción para ella. El momento se cerró con una foto que la propia Andrea le pidió a la actriz, quien accedió amablemente y hasta se ofreció a tomarla ella misma con el celular. Además, le dio permiso para publicarla en sus redes sociales, gesto que Andrea valoró profundamente. Sin dudas, fue una experiencia significativa y muy especial en su trayectoria profesional.
Una pasión que nació casi por casualidad
Andrea recordó que su camino en la peluquería comenzó en plena búsqueda personal. “Probé estudiar Ingeniería un año, pero sentí que no era mi rumbo. Hice un curso de peluquería, me encantó, y nunca más paré. Empecé como ayudante, que es donde más se aprende, y fui tomando talleres, viajando, perfeccionándome. Incluso di clases de automaquillaje y peinados”, subrayó.
Hoy, en su salón de Chimbas, no solo atiende a sus clientas de siempre, sino que también sueña con comenzar a dictar talleres para compartir lo que aprendió con nuevas generaciones.
Un momento único
Peinar a una figura como Gimena Accardi fue para Andrea una mezcla de emoción, reconocimiento y orgullo personal.
“Cuando terminé, vino el manager y dijo: ‘¡La peinó con volumen como te gusta!’”, recordó con una sonrisa.
También destacó el cariño de la gente cercana: “Subí un estado diciendo que iba a atender a una clienta especial, y después cuando conté quién era, todos se pusieron felices por mí. Eso también es muy importante, sentir que los demás se alegran por uno”.
Por último, destacó que su familia fue un pilar fundamental, ya que desde el primer momento confiaron en ella y acompañaron sus decisiones.