La pandemia del Covid-19 preocupó a cientos de países y Argentina no fue la excepción, mucho menos San Juan, en donde desde hace más de un mes se tomaron medidas excepcionales para tratar de contener la expansión del virus, con resultados hasta el momento positivos.
Sin embargo el riesgo de un posible brote todavía existe y por eso investigadores de la Universidad Nacional de San Juan – UNSJ – comenzaron un estudio por un posible escenario de evacuación de riesgo en San Juan.
“Una evacuación de riesgo de salud se da, por ejemplo, debido al surgimiento de un pico de contagios en un sector de la sociedad. En ese caso se debería evacuar a las personas sanas o bien restringir la salida a una zona que cumple con las condiciones de seguridad con respecto al protocolo de salud estipulado. Se busca determinar zonas seguras y posibles para albergar población en caso de un pico de contagios o complejización de la epidemia”, explicó la geógrafa Doctora Elvira Suárez Montenegro, a cargo del proyecto, a Diario La Provincia SJ.

El proyecto de investigación denominado “Capacidad de recepción territorial para la mitigación del impacto social del Covid-19 en la ciudad de San Juan”, se desarrolla en el Instituto de Geografía Aplicada de la Facultad de Filosofía, Humanidades y Artes de la UNSJ, en el marco de actividades del Programa Geografía de San Juan a través de estudios departamentales: propuestas de ordenamiento territorial.
“Este estudio es preliminar y se obtienen resultados a través de mapas de distintos sectores de la Ciudad a través de colores. Los primeros datos mostraron colores en la zona de Pie de Monte, en La Bebida, Rivadavia y también en Santa Lucía, esa son las primeras “zonas seguras” identificadas”, detalló Suárez Montenegro.
Y agregó que “Sin embargo se trata de zonas contradictorias ya que en una no hay tanta accesibilidad de salud como en la otra. A Pie de Monte se la considera zona alejada y en alguna medida todavía existe un cierto confort climático por las fincas que fueron quedando. Es una de las lecturas posibles que realizamos. Todo tiene que ver, lo que medimos en los mapas son la distancia, recorrido de un posible ingreso de virus, arbolado público, insolación, confort climático y agua”.

Dicho programa de investigación tiene entre sus resultados innumerables datos sobre la geografía de la provincia, como así también propuestas para la expansión de la ciudad, análisis territorial de centros, de servicios, de equipamiento, de accesibilidad y además incorporó una nueva línea en el área pedagógica de la gestión participativa del territorio a través del modelo GEOT educa con niños y adolescentes. Este modelo forma parte de AulasODS de la Unesco y actualmente desarrolla actividades de extensión en escuelas de la provincia, de Panamá y Colombia.
Tal es la complejidad y utilidad de los resultados de este equipo de investigación que entre los mismos se destacó el uso del concepto de capacidad de acogida o recepción territorial.
“Estos primeros resultados de San Juan ya fueron validados sin embargo cabe destacar que no son los definitivos. Aunque este análisis territorial determina a través de índices zonas optimas, potenciales y restringidas solo es una propuesta y recomendación, porque desde el equipo de investigación y como geógrafos sabemos que el ser humano tiene la capacidad de vencer cualquier obstáculo. El resultado inmediato de la generación de este modelo cartográfico es el conocimiento del territorio para el diagnóstico y prospección de tareas de mitigación de impacto”, aseguró la Doctora.
El estudio se presentó a la convocatoria del Ministerio de Ciencia y Tecnología de la Nación, y aunque la Doctora aseguró que la convocatoria no estaba dirigida a las Ciencias Humanas, desde el equipo surgió la necesidad de mostrar los resultados iniciales que serán de suma utilidad para la gestión de la emergencia sanitaria.
“El proyecto será de suma utilidad, por eso se está trabajando a contra reloj para tener más resultados en un mes, tal como pide la convocatoria desde Nación. La forma en que los científicos respondamos al emergente COVID-19 será la receta para mitigar su impacto. Y esta forma debe tener como premisa el bien común, la resiliencia del ser humano en el territorio y la continuidad de la vida en el espacio geográfico”, finalizó.
El equipo del proyecto está formado en su mayor parte por geógrafos. Recientemente se sumó un experto en turismo, formando parte junto a alumnos becarios de un joven equipo de investigadores que son Yanina Sesé. Laura Araya y Mauro Fernández.
En este ámbito desde el equipo de investigación se resaltó el apoyo de la gestión por parte de la Sra. Decana Mag. Rosa Garbarino, y de su equipo de secretarios junto al apoyo de los directivos del Instituto de Geografía Aplicada: el Dr. German Poblete y la Mag. Sandra Sánchez quien también dirige el programa de Ordenamiento Territorial.