Como tantas otras veces en la historia política del país, el sindicalismo argentino enfrenta una nueva fractura. La movilización convocada para el 21 de febrero por parte del exsecretario general de Camioneros Hugo Moyano dividió las aguas dentro de la CGT y unió a otros sectores alejados de esa central obrera, como la CTA. Con la noticia de que Carlos Acuña, uno de los triunviros, no estará ese miércoles en la calle, se confirma que la decisión de marchar implosionó en una organización que no estaba del todo unida.

El primero en oponerse fue Héctor Daer, uno de los que ocupa el triunvirato que comanda la CGT. Lejos de Moyano, el dirigente de la Sanidad prefiere mantenerse alejado de las marchas contra el Gobierno. “El Consejo Directivo tiene que intentar volver a los consensos necesarios para sintetizar la opinión de todas las organizaciones sindicales”, sostuvo, hace unos días, en diálogo por Radio Mitre.

El otro gremialista que finalmente sentó posición fue Carlos Acuña, también triunviro de la CGT y secretario general del gremio de los Estacioneros. “No vamos a movilizar pero apoyamos el reclamo porque es razonable”, aseguró. Además los otros que rechazaron marchar son Sergio Sasia (Unión Ferroviaria), Emiliano Gallo (UOM), Rodolfo Daer (Alimentación). Está en duda Luis Barrionuevo, de los Gastronómicos.

Los que confirmaron su presencia

  • Las dos CTA (CTA de los Argentinos -la de Hugo Yasky-, y CTA Autónoma -la de Pablo Micheli-). 
  • Sergio Palazzo, de Bancarios 
  • Julio Piumato, de Judiciales 
  • Roberto Baradel, de Suteba
  • Juan Carlos Schimd, de Portuarios 
  • La Cámpora 
  • Agrupaciones sociales como Barrios de Pie 
     

Fuente: TN