La Justicia decidió absolver al médico Lucas Quinscara en la causa por homicidio culposo tras la muerte de un recién nacido en el Hospital San Roque, donde se desempeñaba como profesional de guardia. La decisión fue tomada por el juez de la Segunda Circunscripción Judicial, Martín Peñafort, quien concluyó que no había evidencia suficiente para dictar una condena penal.
El hecho ocurrió el 4 de febrero de 2024, cuando una joven de 24 años ingresó al hospital con fuertes dolores abdominales, de espalda y piernas, sin saber que estaba embarazada. Quinscara, médico de guardia en ese momento, le colocó un suero y le recetó calmantes, pero no detectó que se trataba de un cuadro obstétrico.
Al día siguiente, una radiografía permitió descubrir que la paciente se encontraba en trabajo de parto. El bebé nació sin vida y, a partir de entonces, la causa judicial se centró en una presunta negligencia médica.
Durante el proceso, el fiscal Alfredo Sohar había solicitado una pena de tres años de prisión condicional y ocho años de inhabilitación para ejercer la medicina. Sin embargo, la defensa del médico sostuvo que la responsabilidad no recaía sobre él, sino sobre fallas estructurales del sistema de salud.
Finalmente, el juez Peñafort dictó la absolución y anunció que los fundamentos del fallo serán leídos el próximo 21 de mayo.