Una definición del tribunal, en la sentencia por el juicio por el homicidio de José Marcelo Amarfil, le pone sus puntos a la causa. Es que los magistrados retiraron por unanimidad uno de los dos agravantes de la calificación contra la docente e investigadora del Conicet, Luciana Teresita Bustos.

Bustos había sido sentenciada a prisión perpetua el pasado 26 de mayo, acusada de propiciarle un corte mortal en el cuello a Amarfil en el interior de su auto el pasado 16 de enero de 2024 en Las Chacritas, 9 de Julio.

Bustos, docente universitaria e investigadora del CONICET, fue hallada penalmente responsable del hecho. Foto: Diario La Provincia SJ

Según se expuso durante el juicio, el hombre habría sido ultimado en medio de un juego sexual en el que estaba con los ojos vendados y maniatado. Esto fue motivo para que el Ministerio Público Fiscal, encabezado por Francisco Pizarro, pidiera dos agravantes: uno por mediar un vínculo y otro por alevosía. Este último fue descartado, y como se esperaba, la defensa impugnó la sentencia mientras que la querella, en compañía del Ministerio Público Fiscal, hizo lo propio por el agravante que no se ratificó.

Este hecho supone una importante posibilidad para la defensa de Bustos, ya que le permitiría insistir con la hipótesis de que Bustos se habría defendido de un ataque sexual por parte de Amarfil. “Para que se configure esa figura tienen que existir dos elementos: por un lado, la indefensión por parte de la víctima y, por otro lado, el aprovechamiento por parte del victimario para poder llevar a cabo su cometido”, dijo la abogada Fabiana Salinas a Diario La Provincia SJ.

La defensa de Bustos pedirá su absolución. Foto: Maximiliano Huyema – Diario La Provincia SJ- Archivo

Según manifestó, el tribunal consideró, contrario al MPF y la querella, que pese a que Amarfil tenía puestas las esposas, tenía manera de defenderse. “Nunca pesaron el cuerpo de Amarfil, pero si uno ve la diferencia que existe entre Luciana Bustos y Amarfil, te das cuenta de que es una persona que pesa más de 100 kilos”, expresó y completó: “Él tenía la posibilidad de defenderse”.

Además, sostuvo la versión de que el hombre fallecido se autoagredió, provocándose una herida previo a dicho ataque sexual y posterior muerte.

Ahora, las partes esperan la conformación por sorteo de los tribunales para las audiencias de impugnación para hacer los planteos.

 

Para el fiscal Francisco Pizarro y la ayudante fiscal Gemma Cabrera, Bustos actuó con premeditación.

 

Por un lado, la defensa considera que el retiro del agravante es favorable a su postura y busca poner en crisis la existencia de un vínculo de pareja. A su vez, asegura que no se ha considerado la legislación vigente para casos de violencia de género en este caso. “No han tenido en cuenta lo manifestado por Luciana Bustos ni lo manifestado por esta defensa; ellos fueron amigos. Para hablar de un vínculo tiene que haber elementos que lo determinen”, dijo Salinas al respecto.

En relación a una posibilidad de un vínculo de pareja, agregó: “No era notorio, no era socialmente conocido; ellos no tenían intimidad, era un trato de amigos. Compartían momentos como la música, el deporte. El trato de Luciana con Marcelo Amarfil siempre fue de asistencia, tanto económica como por las crisis que le dio cuando se murió su mamá, pero nunca de romance.

El arma homicida hallada en el auto de Amarfil.

Sobre el corte mortal que Bustos le profirió en el cuello con un arma blanca, Salinas aseguró que Bustos “se vio sorprendida” por Amarfil, lo que habría desencadenado el desenlace fatal.

Desde el Ministerio Público Fiscal, Francisco Pizarro dijo: “Nosotros, dentro de los plazos legales, junto a la querella, impugnamos la sentencia porque consideramos que corresponden los dos agravantes” y agregó: “Nosotros tenemos que contestar el recurso de impugnación que ha hecho la defensa; lo vamos a rechazar”.