La muerte de Diego Andreoni, el joven futbolista de 30 años, sigue resonando con fuerza en San Juan. El hombre, víctima de un balazo en el abdomen, luchó durante 12 días por su vida, pero finalmente falleció debido a las heridas sufridas. Este hecho generó una profunda tristeza en su familia, amigos y la comunidad sanjuanina.
Este miércoles 2 de abril, familiares, amigos y vecinos de Diego se unieron para exigir justicia. La marcha, que comenzó a las 20:30 horas, convocó a los presentes en las intersecciones de las calles Rivadavia y Mendoza, en pleno centro de la ciudad.
Con carteles en mano, y el rostro marcado por el dolor, los sanjuaninos recorrieron la Plaza 25 de Mayo pidiendo que los responsables de la muerte de Diego enfrenten las consecuencias de sus actos.
Alberto Andreoni, el padre de Diego, se mostró visiblemente afectado y expresó su sufrimiento ante la pérdida de su hijo. “Pedimos perpetua, que no salgan más“, demandó con voz entrecortada por la emoción.
En diálogo con Diario La Provincia SJ, añadió: “Nosotros vamos a seguir con este dolor toda la vida. Mi hijo fue un tipo de trabajo, un padre de familia. Lo que hablamos nosotros es lo que realmente era él. Siempre se dedicó al fútbol. Tuvo un accidente hace 9 años, el médico le dijo que nunca más iba a volver a jugar. Se preparó, se rompió el alma y volvió a jugar. Todas las noches jugaba“.
Alberto, además, destacó la gravedad del hecho: “Si llevas un arma a la cancha es porque la tienes pensada usar, porque tienes la mentalidad podrida de hacerle daño a la gente”, expresó con indignación, al referirse a la violencia que le arrebató la vida a su hijo.
La marcha, que recorrió el centro de la ciudad, dejó claro el clamor de una comunidad que no descansará hasta que se haga justicia por Diego.
El dolor de la familia fue compartido por los amigos de Diego, quienes también se unieron al pedido de justicia. “Lo único que pedimos es justicia“, expresó uno de los amigos de Diego, quien se mostró visiblemente afectado por la partida de su amigo.
Y agregó: “Pedimos a los jueces y fiscales que están a cargo de este caso que pongan mano dura. Queremos la pena máxima. Diego salió a jugar al fútbol y no volvió más. Estamos muy dolidos por su partida“.
