Para Victoria Garro desde que su hijo Luis Rey Estela ya no está en este mundo, todo es tristeza. Hace 25 años fue atropellado en la calle Barboza en Sarmiento y nunca se encontró al culpable. Este 5 de enero Luis estaría festejando sus 51 años.

Acababan de festejar juntos la llegada del año 2000. Luis tenía 26 años, era empleado rural, pasante del municipio  y principal sustento de su casa. Decidió ir a juntarse con unos amigos para salir a bailar. Se despidió de su madre con un “ya vuelvo mami”. Nunca llegó a encontrarse con sus amigos. Nunca volvió a casa con su familia. Su madre lo sigue esperando. 

Entre la salida de Luis de su casa en Colonia Fiscal Sur y al hora en la que lo encuentran sin vida hay una laguna de tiempo sin respuestas. “Acá en la casa había estado él, me dio el último abrazo, el último beso, el último te quiero.  Él sí va al baile con los amigos y se había quedado de juntar con los amigos. Siempre me decía enseguida vuelo y todavía lo sigo esperando.
Él era el mayor de los hombres, iba a cumplir 27 años el 5 de enero del mismo año que le quitaron la vida”, contó entre lágrimas  a Diario La Provincia, Victoria Garro. 

Era un niño excelente, un ejemplo para muchos muchachos. Él la tomaba nunca, tomó nunca, jamás la vida, nunca  se drogó,  tenía muchísimas amistades”, recordó su madre.

 

Sobre la causa la mujer recordó que “a los siete meses me cerraron la causa porque no tenían pruebas“.  “Yo estaba sola en ese momento,  no tenía apoyo. Todos los días iba a la policía  y mi hijo más chico que tenía 15 años en ese entonces me acompañaba. A mí me dieron muchas versiones, uno me dijo una cosa, el otro me dijo otra, y nunca me dijeron la verdad“. 

Victoria dijo que había versiones que no le cerraban en cuanto a qué pasó esa noche. “Un policía me dijo que ellos habían pasado a las tres menos cuatro y no había nadie ahí. Otro, me dijo que él había recibido una llamada anónima diciendo que había un cuerpo tirado a la banquina. Y así muchas cosas, muchas versiones,  me cuesta mucho hablar eso”, agregó la mujer.

Tampoco hubo testigos certeros que aportaran datos. “Unas chicas supuestamente decían que aparentemente podría ser  un auto como deportivo que lo agarró a el”, relató la mujer y agregó que en ese entonces hubo muchos cambios en cuanto a quienes estaban a cargo de la investigación.

“Uno de los policías me dijo después que ya no podían hacer nada, porque era como buscar un agujero en un pajar”, contó Victoria

A él lo llevaron por delante, porque casi me dio dos metros, mi hijo, y supuestamente decían, que lo habían desnucado, lo habían agarrado de atrás, porque él se fue a mi bicicleta. Donde ocurrió esto hay gente, pero nadie vio nada, pero yo creería que para esas fiestas siempre hay alguien que mira, que observa, y no sé si quedó tapado esto, no sé, la verdad es que no entiendo“, concluyó.