En una audiencia realizada este viernes, se decidió pasar a un cuarto intermedio para avanzar con la investigación de un violento robo que tuvo lugar en el departamento de Chimbas, el pasado 12 de octubre. De esta manera, Cuello Angelo Lionel deberá seguir con prisión preventiva por acusado de robo agravado, atentado a la autoridad y otros delitos, a la espera de nuevas disposiciones judiciales.
De acuerdo con la información de la U.F.I. de Delitos Especiales, el 12 de octubre de 2024, alrededor de las 12:40 hs, la víctima se desplazaba por la calle Lateral Este de Ruta 40 en dirección sur-norte. A unos 150 metros al norte de calle Benavidez, observó a un sujeto de aproximadamente 1,80 mts de altura, con buzo gris y short oscuro, que cruzó la vereda, lo que le pareció extraño, comenzando a correr.
En ese instante, Cuello Angelo se acercó a la víctima, extrajo un arma de fuego y le exigió: “Dame todo”. La víctima intentó resistirse, pero Cuello la sujetó del cordel de la riñonera que llevaba en la cintura, continuando con amenazas: “Dame todo o te mato”, mientras la apuntaba con el arma. Tras varios tirones, logró despojarla de la riñonera y huyó hacia el sur, sin causarle lesiones.
La víctima lo persiguió a pie y, al llegar a la intersección con calle Benavidez y Ruta 40, específicamente debajo del puente, Cuello arrojó la riñonera sobre una camioneta. La víctima lo seguía a unos 10 metros y logró avistar un patrullero que circulaba por calle Benavidez. Comenzó a gritarles y a señalar al sujeto.
El personal policial intentó interceptar al detenido, quien logró evadirlos. El cabo González descendió del vehículo y comenzó una persecución a pie. En ese momento, Cuello le disparó sin impactar. El cabo Molina, que conducía el patrullero, giró el vehículo para continuar la persecución. Cuello ingresó por un pasante que cruzaba el canal Benavidez hacia el Barrio Costa Canal y disparó varias veces contra el personal policial.
La persecución continuó a pie por parte de ambos policías, y Cuello volvió a disparar. Ante el temor por sus vidas, los policías respondieron con varios disparos, sin impactar al detenido. Al llegar a su domicilio Cuello ingresó, mientras el personal policial lo seguía de cerca.
Dentro del domicilio, Cuello se dirigió a un dormitorio y se atrincheró. Se inició un forcejeo, durante el cual se le salió la remera y arrojó el arma de fuego al suelo. Tras resistirse con golpes, los policías lograron esposarlo y aprehenderlo, además de secuestrar el arma.
En el lugar había varias personas que dificultaban la aprehensión, entre ellas Cuello Héctor Marcelo, quien agredió a los policías. Por ello, también se procedió a la aprehensión de este último. Posteriormente, se comunicó lo sucedido al Ayudante Fiscal en turno, quien se constituyó en el lugar y dio inicio al procedimiento especial de Flagrancia. La audiencia concluyó en cuarto intermedio, a la espera de nuevas decisiones judiciales.