Este lunes 4 de agosto, se concretó la audiencia de impugnación a la sentencia que condenó a prisión perpetua al policía Ricardo Rodríguez por el homicidio del camionero Federico Orihuela. El hecho ocurrió el 9 de febrero de 2024 en Valle Fértil, durante un operativo policial, cuando Rodríguez disparó contra el conductor del camión. En mayo de 2025, la Justicia lo condenó bajo la figura de homicidio doloso agravado por abuso de función pública.
Durante la audiencia, que se realizó a las 10 de la mañana en Tribunales, la defensa del policía —integrada por los abogados Martín Zuleta y Federico Victoria— presentó el recurso con el objetivo de revisar la sentencia o modificar la calificación del delito. Rodríguez participó de forma remota desde el Servicio Penitenciario Provincial, y el tribunal estuvo conformado por los jueces Renato Roca, Eduardo Raed y Maximiliano Blejman.
En diálogo con Diario La Provincia SJ, Daniela Rodríguez, hermana del condenado, explicó que el pedido de impugnación se centró en dos ejes: la supuesta falta de imparcialidad del juez que dictó la sentencia original y la valoración de ciertas pruebas durante el juicio. “El juez mostró una tendencia a encontrar culpable a Ricardo desde el inicio, lo que afecta el proceso y lo vuelve anticonstitucional”, afirmó.
Además, sostuvo que algunas pruebas fueron tomadas en contra de Rodríguez y no a su favor, como los resultados de los análisis toxicológico de la víctima. “El camionero tenía alto grado de alcohol y cocaína en sangre, y también restos de degradación de fuego. Son pruebas que se dieron en juicio”, detalló. También hizo referencia a testimonios de civiles y policías presentes en el lugar, que, según ella, expresaron temor por sus vidas.
Daniela expresó el dolor que atraviesa su familia desde que su hermano fue condenado, y señaló que confían en que los jueces del tribunal actuarán con objetividad. “Ricardo es un gran ser humano, actuó para cuidar a los demás ciudadanos sin intención de matar”, declaró. “Es una situación de injusticia que no le deseamos a nadie”, agregó.
Los jueces del Tribunal de Impugnación tienen un plazo de 30 días para resolver si confirman o modifican la condena.