El juez de Garantías Javier Figuerola resolvió el sobreseimiento de Juan Pablo Echegaray en la causa que investiga la muerte de Lucía Rubiño, la joven que falleció en un siniestro vial.
La audiencia, que se llevó adelante en Tribunales, fue considerada clave para el futuro del imputado y marcó un punto final —al menos judicial— para uno de los casos más sensibles de los últimos años en la provincia.
Durante las últimas jornadas, se escucharon los argumentos de todas las partes involucradas en el proceso. El fiscal Iván Grassi, del Ministerio Público Fiscal, fundamentó su solicitud de sobreseimiento al considerar que no existen elementos suficientes para sostener una acusación firme contra Echegaray por homicidio culposo.
En oposición, el abogado Marcelo Fernández, representante legal de la familia de Lucía, rechazó enérgicamente el pedido. Afirmó que sí existen pruebas que ameritan la apertura de un juicio oral para esclarecer las responsabilidades y que la decisión de archivar la causa sería un acto de impunidad.
La lectura de la resolución fue fijada para este martes 13 de mayo, momento en que se confirmó el sobreseimiento de Echegaray, desligándolo formalmente de la acusación por homicidio culposo.