Finalmente, Luciana Bustos rompió el silencio para defenderse en el juicio que se le sigue por el crimen de Marcelo Amarfil. La investigadora del CONICET aseguró que ella se defendió aquel día porque el fallecido, a quien identifica como “mi amigo” quiso abusar de ella. Además habló de cómo se sentía él anímicamente por la muerte de su madre.
“Había dentro del auto las cosas por la misa de su mamá por el aniversario del fallecimiento y eso cuando él lo vio se puso mal no quería volver a su casa, no quería“, expresó sobre aquella noche y agregó: “la ausencia de su mamá le pesaba mucho. Me pidió que fuéramos a dar una vuelta para distenderse”.
En ese contexto es que ambos decidieron dar una vuelta en el auto para “poder charlar, escuchar música, nada fuera de lo habitual“. Sin embargo después habría comenzado todo lo malo.
Luciana dijo que él siempre tenía “muchas diferencias con mi pareja, con mis amigas, nunca los quiso por diferencias políticas, religiosas, de sexualidad también“.
La mujer quien desmintió que haya habido una relación de amor entre ambos y recordó que tenía una “profunda amistad” con él, quien habría conocido siempre la condición de ella de lesbiana. Además aseguró que él sabía que ella estaba en pareja.
“Nunca quiso que yo tuviera pareja con mujeres. No lo gustaba. No quería estar cerca de mi pareja. Conoció a mi pareja anterior“, destacó.
Luego agregó: “Hizo un escándalo porque no le gustaba la escena de cariño en público. Entonces, yo acepté también eso. Entonces empezó a ponerse mal. Él ha tenido siempre muchas dificultades”.
EL CRIMEN
Sobre lo que ocurrió aquella noche, ella aseguró que él se estuvo masturbando y tenía viagra. “Él se montó encima mío, me colocó las esposas, me puso el antifaz sobre la frente“. Ante esto, ella le pidió “que me llevara a mi casa. Estaba muy asustada, no quería, que no sabía lo que estaba pasando“.
“Le pedía que se saliera, que me dejara en paz”, relató sobre los momentos previos al fatídico desenlace. Luego destacó que ella lo “insultaba y le pedía que se saliera porque obviamente no quería que me violara, que no me gustan los hombre, mucho menos que una persona conocida y querida” le hiciera eso. En este escenario, Luciana dijo que en ese momento, Marcelo le dijo que se quedara tranquila: “vida quédate tranquila porque soy yo, no actués como una histérica“.
En ese momento ella tomó el cuchillo y terminó con la escena. “Tomé el cuchillo y me defendí. Me hago cargo porque yo me defendí. Era mi vida o era la suya. Mi amigo abusó de mí y yo me defendí”, finalizó.
Además dijo que el cuchillo que usó fue sin premeditarlo, porque lo llevaba consigo tras haber participado de un asado la noche anterior.
El crimen ocurrió en enero del 2024 en Las Chacritas, departamento 9 de Julio. Amarfil apareció degollado y con varias heridas más.