En un juicio abreviado cargado de tensión, Ariel Omar Pérez aceptó ser el autor del femicidio de Yanina Pérez y fue condenado a prisión perpetua. El imputado, que ya había confesado el asesinato, protagonizó un duro cruce con la jueza Flavia Allende, criticó el accionar de los fiscales y llegó a lanzar una frase estremecedora: “Lo volvería a hacer 50 mil veces”.
El proceso judicial se desbordó por momentos debido a las actitudes violentas e inapropiadas de Pérez, quien tuvo que ser retirado de la sala. El juicio continuó de forma virtual desde otra sala, pero ni eso evitó que el acusado lanzara agravios, insultos y cuestionamientos. “No me voy a sentar porque no se me da la gana, no se me dan los huevos”, dijo al momento de desobedecer las instrucciones del tribunal.
Durante el desarrollo del juicio, Pérez afirmó sin rodeos: “Yo ya lo he reconocido… y lo volvería a hacer 50 mil veces”. Tamabién se burló del procedimiento judicial, cuestionando la labor investigativa: “¿Todas esas pruebas las recabaron los fiscales?, ¿todo eso averiguó el fiscal?… Me parece que todas las pruebas se las he dado yo”.
Ante esa actitud, la jueza Allende le respondió con firmeza: “Es importante que lo reconozca porque este Tribunal no tenía conocimiento de ello”, y defendió el carácter público del proceso. “Es necesario que todo quede ventilado en este juicio oral y público”, señaló, a lo que Pérez retrucó con sarcasmo: “Pero nunca han ventilado nada”.
El juicio se llevó adelante con el consentimiento de la defensa del imputado, quien cerró su participación con otra frase provocadora: “Sí, la pij*, sí lo acepto, chau”*. En paralelo, sostuvo: “Yo no soy loco”, negando cualquier argumento vinculado a inimputabilidad. La audiencia fue seguida con atención por familiares de la víctima, quienes escucharon con indignación la declaración de culpabilidad de Pérez y sus amenazas verbales.