El martes pasado, Roberto Carlos Peña, casero de una finca ubicada en el departamento 9 de Julio, fue encontrado muerto en circunstancias que, al principio, no despertaron sospechas. Sin embargo, tras la autopsia realizada por el médico forense, la causa de su fallecimiento dio un giro inesperado: murió de forma violenta, como consecuencia de dos golpes severos que le provocaron la explosión del corazón y del bazo.

El caso está siendo investigado por el fiscal Iván Grassi, de la UFI Delitos Especiales, quien confirmó que inicialmente se pensó en una muerte por causas naturales. “El médico de Criminalística no advirtió signos de criminalidad. El hombre tenía sus pertenencias: billetera, celular. No faltaba nada y no había nada violentado en la finca“, explicó el fiscal en Radio Estación Claridad.

El miércoles el médico forense cambió el rumbo de la causa: los golpes eran similares a los observados en siniestros viales. Fue entonces cuando se planteó una nueva hipótesis: el ataque de un caballo pura sangre, animal que se cría en ese establecimiento rural.

El fiscal Iván Grassi, a cargo de la investigación por la muerte del hombre en 9 de Julio. Foto archivo: Diario La Provincia SJ / Maximiliano Huyema.

La hipótesis del caballo agresivo

El dato que llamó la atención de los investigadores fue el hallazgo de un boyero roto, el cerco que impide que los caballos machos salgan de sus corrales. Según el relato del propietario, uno de los machos —el único que tenía bozal y cuerda— había logrado salir y estaba con las hembras, algo que puede alterar el comportamiento del animal por el instinto de apareamiento.

El casero no tenía experiencia con caballos, y el dueño nos dijo que él mismo se encargaba de esos animales. Inferimos que al regresar, el casero advirtió que el animal se había escapado, intentó llevarlo nuevamente al corral y allí se produjo el ataque”, detalló Grassi.

El cuerpo fue hallado justo donde termina el boyero, rodeado de pisadas de caballos. “Todo indica que el hombre quiso intervenir y el equino, en un estado alterado, lo golpeó violentamente”, agregó el fiscal.

El casero de una finca en 9 de Julio sufrió una muerte violenta. Foto: archivo.

Estudios pendientes y elementos secuestrados

Para reforzar o descartar esta hipótesis, la Fiscalía avanza en diversos estudios técnicos y científicos:

  • Estudios de anatomía patológica: análisis microscópico de los órganos afectados.
  • Análisis de ADN: se tomaron muestras de las manos de la víctima para detectar rastros.
  • Triangulación de señal del celular: busca reconstruir los últimos movimientos de Peña.
  • Peritajes a la cámara de seguridad de la casilla, que no muestra el lugar exacto del hecho, pero sí permitirá observar movimientos en el perímetro.

Los resultados de estos estudios estarán listos en aproximadamente un mes, y serán clave para determinar si se trató de un accidente fatal provocado por un animal o si hay otros elementos por considerar.