La fiscal Paula Arredondo, de la Unidad Fiscal de Delitos contra la Propiedad, brindó detalles sobre el robo ocurrido en una relojería ubicada en el edificio Catamarán X, en Capital. El hecho ocurrió en horas de la madrugada del domingo y, según el relevamiento de cámaras, los autores actuaron en apenas cuatro minutos.
“En el día de ayer, sobre las 10 horas, tomamos conocimiento del hecho. La unidad fiscal se constituyó en el lugar y comenzamos con los relevamientos de cámaras”, indicó Arredondo en diálogo con Radio Mil 20. Como el comercio no contaba con sistema de videovigilancia, se trabajó con imágenes de locales vecinos y del propio edificio.
Respecto al accionar de los delincuentes, la fiscal explicó: “Se advierten dos personas caminando que rompen la vidriera y ahí es donde ingresan. Por el momento no se pudo determinar si llegaron en un vehículo. La acción duró aproximadamente cuatro minutos y eran dos personas”. Agregó que “no portaban mochilas ni bolsas, sino que se meten la mercadería sustraída en el interior de sus prendas”.
Aunque las cámaras captaron a los autores sin cubrirse el rostro, la calidad de las imágenes dificulta la identificación. “No tienen la cara cubierta, pero la nitidez de los registros, que son en blanco y negro, sumado a que era de noche, no nos permite obtener con claridad los rostros”, explicó. Por este motivo, la fiscalía amplió el perímetro de análisis a zonas como Avenida Central, Circunvalación, Córdoba y Paula Albarracín, en busca de nuevos registros que permitan seguir la ruta de escape.
La fiscal también mencionó que se extrajo material fílmico del propio consorcio del edificio. “Estamos tratando de dar con las características físicas. Las cámaras del lugar no nos permiten por el momento visualizar con claridad los rostros, pero tenemos algunas características particulares de los mismos”, señaló.
El propietario del local, un joven emprendedor, había abierto el comercio hacía aproximadamente un mes. Según detalló Arredondo, el damnificado no contaba todavía con alarma ni cámaras propias. En cuanto a las pérdidas, dijo: “El monto aproximado sería entre 10 y 11 millones de pesos, aunque no se llevaron dinero en efectivo ni las joyas de mayor valor”.
Por último, la fiscal confirmó que los trabajos investigativos continúan: “Ayer (domingo) los ayudantes fiscales estuvieron hasta altas horas de la noche en el lugar y hoy se sigue trabajando. Se están realizando todas las diligencias para intentar identificar a los autores del hecho”.