Tenía 60 años y aquel día abrió la puerta de su casa al pizzero sin pensar que todo terminaría en desgracia. Hilda Rosa Tobares vivía en Villa Ramos, en Chimbas, y el 18 de diciembre del 2020 fue ultimada de un puntazo. Por el hecho quedó detenido un hombre que fue identificado como Jorge Baraona Salazar.

Este miércoles se cumplen 4 años de aquel brutal crimen que tiempo después encontró justicia pero no como lo esperaban los familiares y seres queridos de Hilda. Las crónicas del crimen recuerdan que fue un asesinato muy brutal, que partió de la confianza de la víctima.

Aquel día, no se encontraron rastros de violencia en las puertas y ventanas, con lo cual hizo suponer que la víctima conocía al victimario. Además no se robaron nada del lugar y sobre la cama se encontraron dos cuchillos, uno de estos tipo carnicero que fue el usados para ultimar a la mujer.

Además, ella tenía signos de que se intentó defender para evitar la muerte y por eso le quedaron las manos heridas. Los gritos pidiendo ayuda fueron los que alertaron a una vecina que rápidamente llamó al 911 pero cuando la policía llegó ya había muerto.

Por el crimen, casi un año después, el 15 de diciembre del 2023 fue condenado Jorge Baraona Salazar. El pizzero de 46 años, recibió una pena de 12 años y 6 meses de prisión efectiva al ser encontrado culpable del delito de homicidio simple