Este fin de semana, el interior del Barrio Güemes fue escenario de un violento episodio que dejó a un joven en grave estado tras recibir un disparo. Según informó el fiscal a cargo de la investigación, Francisco Micheltorena, el hecho ocurrió en la madrugada del domingo cuando Thiago Ortiz, fue trasladado al Hospital Guillermo Rawson con una herida de arma de fuego.
Micheltorena explicó a los micrófonos de Estación Claridad que el joven fue trasladado en un remis, acompañado de un amigo, de apellido Lucas Carabajal. El amigo informó a la guardia del hospital que había encontrado a Ortiz tendido en la vía pública, gravemente herido en el Barrio Güemes. “El remisero manifestó que fue a dejar a una pasajera en el barrio y cuando llegó escuchó la detonación de un arma de fuego en el domicilio, lo que no cuadraba con lo informado por el amigo”, detalló el fiscal.
A partir de ahí, se iniciaron las investigaciones correspondientes, y una de las primeras medidas fue realizar un allanamiento en el domicilio donde el remisero había dejado a la pasajera. En el lugar, encontraron manchas de sangre distribuidas en diversos ambientes, aunque no en gran cantidad.
El remisero también explicó que, al llegar al domicilio, se encontró con un grupo de personas discutiendo en el exterior. La pasajera se bajó del vehículo y tuvo una discusión, lo que generó una serie de dudas sobre el relato del amigo de Ortiz. “Entendemos que la escena del hecho fue adulterada claramente, los familiares de Carabajal participaron en esta actividad de adulterar la escena del hecho”, afirmó Micheltorena.
En una de las habitaciones del domicilio, los investigadores hallaron evidentes signos de una limpieza reciente y elementos que sugerían que se había intentado ocultar algo.
De acuerdo con los avances de la investigación, se estableció que en el interior del domicilio estaban presentes Ortiz y Lucas Carabajal. Los testigos indican que, tras la discusión, tres personas subieron a Ortiz al remis, y luego se dirigieron al hospital.
El fiscal también mencionó que, aunque no se ha determinado aún de quién es el arma de fuego utilizada, los familiares de Carabajal afirman que la pistola pertenecía a Ortiz. Sin embargo, el arma aún no ha sido secuestrada por las autoridades.
El médico que atendió a Ortiz confirmó que la bala ingresó por su cuello. Mientras tanto, los investigadores continúan profundizando en el caso y recopilando pruebas. “Según las declaraciones, uno de los hermanos de Carabajal habría sido quien limpió la escena del hecho. Toda esta información está siendo cuidadosamente investigada”, dijo Micheltorena.
El fiscal indicó que tiene elementos suficientes para formalizar cargos contra Carabajal y solicitar su detención preventiva mientras se siguen desarrollando las investigaciones.
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