En un operativo policial y judicial, este mediodía se demoró a una bioquímica residente del Hospital Rawson por la amenaza de bomba al nosocomio. Desde su celular, tal como detectaron especialistas tecnológicos de la policía, salió la llamada hacia el 911.
Los abogados de la profesional, que se desempeña en el área de Laboratorios del Hospital, llegaron rápidamente. Uno de ellos, Guillermo Ruíz Giordano expresó a la prensa que la sospechosa estaba trabajando al momento de ejecutarse el llamado. Ante eso, señalaron que habría sido víctima del hackeo de su línea telefónica.
Hasta tanto, la investigación de la UFI Genérica, con el fiscal Ignacio Achem sigue en marcha. Lo que se conoció es que el llamado se realizó cerca del ingreso al Hospital de Niños y habló una mujer.
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