A mediados de julio del 2015, una de las postales que más caracteriza a la provincia sufrió una modificación. Es que entre el 11 y el 13 de julio (no se sabe con precisión porque estuvo cerrado por el clima), un fuerte viento zonda derribó una de las “chimeneas” del clásico Submarino.
El proceso de erosión es inexorable e imparable. Nada es imperecedero y en esto reside una de las bellezas del Parque, en que no es permanente. Hacía 35 años que no se caía parte de una geoforma en Ischigualasto y las últimas en desaparecer fueron El Loro y La lámpara de Aladino.
Los primeros meses tras la caída fueron de gran furor, incluso entraban más de 1000 personas diariamente. “En esa época se nos aumentó el público por la curiosidad, no sufrimos ningún tipo de merma. Todo quedó al pie del submarino, ya que cuando cayó se desintegró, quedaron pedazos de arena“, explicó a Diario La Provincia SJ el director del parque Silvio Atencio.
El Submarino visto desde otro de sus ángulos.
A un año del fenómeno, el experto aseguró que la mayoría de la gente no lo nota. “De hecho, mucha gente que no lo tenía en cuenta, que no lo había visitado antes o que no sabe la historia, ni siquiera nota la falta del periscopio. Todas estas formas tienen peligro de derrumbe, pero no se puede saber cuándo. Las formaciones tienen millones de años y se siguen desgastando con el viento, la lluvia y demás. Todas pueden sufrir modificaciones porque fue así como se formaron por el viento y el agua”, agregó.
Otras opciones
Si en algún momento el clásico submarino llega a caerse por completo, deberán buscar la forma de agrandar los caminos para que los visitantes se maravillen con otras estructuras. “Siempre hemos tenido otras geoformas. Sabemos cómo son, a dónde están, muchas son tan bellas como las conocidas, pero están en lugares inaccesibles, y se complica para hacer llegar al turista hasta ahí“, aseguró Atencio.
“Las formas están y en algún momento, sobre todo si llega a haber algún inconveniente mayor, puede llegar a ampliarse el recorrido. Antes de sacarlas a la luz hay que estudiar bien el panorama, porque si las ponemos en consideración de la gente hay que evaluar por dónde va a pasar el camino y demás. Por ahora no están accesibles”, sentenció el director.