Alejandro Balmaceda tiene 26 años, es oriundo de Rivadavia y desde muy joven supo que quería dedicarse a la música. Hoy, sigue apostando a sus proyectos musicales, impulsado por su fe, su historia de vida y el acompañamiento incondicional de su familia.
Compone, graba y ya lanzó varios temas que sonaron en radios y cuentan con videoclips disponibles en su canal de YouTube. Su camino no fue fácil, pero cada paso que dio lo acercó más a su sueño.
En diálogo con Diario La Provincia SJ, Alejandro repasó sus inicios en la música y recordó cómo nació su vocación artística: “Desde chico quería cantar. Decía que quería ser cantante, pero nadie me creía”. El joven aseguró que siempre escuchó a Daddy Yankee, quien también fue una fuente de inspiración en sus primeros pasos en la música.
A pesar de las dificultades, nunca abandonó su pasión. Con el tiempo, logró ingresar a estudios de grabación, subirse a escenarios y consolidar su estilo. Hoy, su música combina reggaetón y RKT, aunque también incursiona en géneros como el cuarteto o el rap cristiano, siempre con un mensaje auténtico y personal.
“Me inspira mucho la historia de Tiago PZK. En su película queda con su mamá y su hermana, y empieza a cantar. Me veo reflejado ahí. Yo también quedé con mi mamá y mi hermana. Sé que es ficción, pero me identifico mucho”, relató Alejandro, haciendo una conexión entre su vida y la ficción que lo impulsa a seguir.
Su próxima canción tiene una fuerte carga espiritual: “Es un tema dedicado a Dios. Es rap. Desde chico iba a la iglesia”. Sin embargo, ya de más grande, decidió volver, y fue entonces cuando vivió un momento muy significativo que lo recargó de fe y lo acercó nuevamente a Dios.
La fe se convirtió en una guía fundamental en su vida. “Le decía a mi mamá: no importa si hay deudas, lo importante es que tenemos salud y comida. Los problemas se arreglan. Yo siento que Dios sí existe. Gracias a Él se me dan las cosas. Sé que mi sueño va a hacerse realidad”, afirmó.
Uno de sus últimos lanzamientos también refleja esa fuerza para salir adelante: “Es un tema de barrio, que habla de amigos que están o no están.Dice: ‘Le voy a comprar una mansión a mami, que no hay carrera, voy a tener infinito Grammy…’. Tengo claro mi objetivo, hablé con Dios y me dijo que ya me tiene lo mío”.
Su madre y su hermana han sido pilares constantes. “Siempre confiaron en mí. Son mis pilares. Al principio uno lo hace solo, pero después se empieza a dar todo de a poco. La gente empieza a creer”, reflexionó.
Actualmente, Alejandro sigue lanzando música, y no pierde de vista su gran objetivo: llegar a las ligas mayores. “Me proyecto a pisar escenarios grandes. Sé que gracias a Dios se me abren puertas. El sueño está en marcha”, concluyó con esperanza.
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