Conocido por despuntar su talento en ritmos tradicionales como el folklore y el tango, Orlando Tejada es realmente un músico todoterreno. Desde chiquito tuvo cercanía con este arte, ya que su padre tocaba el acordeón verdulero y una tía de su madre cantaba y tocaba la guitarra. Hoy, con una vasta experiencia y un importante reconocimiento en la escena provincial, el hombre que también toca teclado y participó en innumerables proyectos de varios estilos que van de la música clásica hasta el rock, música brasilera, compone e incluso forma nuevos artistas en San Juan.
Su historia musical comenzó en la infancia. “Nací en Casuarinas, zona de 25 de mayo, y después nos mudamos al centro, a Villa del Carril. Tocaba una canción que le dicen ‘cromática’, que es la verdulerita, y el profesor me dijo que tenía que aprender música para dejar de tocar el acordeón. Así que me dediqué al piano por tres años”, recordó.
“Mi papá era músico, se llamaba Tomás Gil, y mi mamá, Isabel Tejada. Mi papá era intuitivo y tocaba en reuniones familiares. Yo lo veía tocar ahí”, dijo y agregó: “Yo hacía música en un programa infantil que se llamaba ‘La Pandilla del Tío Melchor’, donde tocaba el acordeón diatónico, el mismo instrumento que tocaba mi papá. Lo vi tocar a él y ahí me nació la herencia musical”, relató. A los 10 años, “empecé a estudiar música con el profesor Perinachi, pero desgraciadamente falleció por peritonitis”.
Tras la pérdida de su maestro, “pasé a otro profesor, Platero, durante un año y me recibí de profesor de música con Alfredo Carvajal, que tenía su conservatorio en Avenida Rioja y Laprida”.
Orlando continuó creciendo en la música, integrando varios grupos. “A los 13 años ya estaba tocando en una orquesta característica. El repertorio era criollo: rancheras, tangos, pasodobles”. Luego, “integré el grupo juvenil Los Salvajes, éramos tan jóvenes en esa época. Hicimos giras por el país y me animé mucho con el tango, que es uno de los géneros que me gusta muchísimo”.
Vivió varios años en Buenos Aires, donde “aprendí sobre interpretación en cursos de tango y muchas cosas lindas que me sirvieron para ampliar mis conocimientos musicales”.
Orlando también mencionó la influencia de su familia. “Tuve cuatro hermanas que han fallecido y un hermano mayor que aún vive. La música llegó a mí por el lado de mi papá y mi mamá. Mi tía, Dolores Mira, era guitarrista y cantaba canciones criollas. La escuché y eso me inspiró”.
Su madre siempre lo apoyó. “Ella me llevaba a las audiciones de radio y festivales. Buscó otros profesores hasta que me recibí de profesor de música con Alfredo Carvajal”. Luego, “integré la Universidad Nacional de San Juan, donde amplié mis conocimientos sobre música clásica”.
En 1980, “renuncié a mi trabajo fijo en el boletín oficial y me fui a Buenos Aires, donde viví durante 30 años. Nunca olvidé San Juan. En 2008, regresé y me radiqué nuevamente aquí”. En 2017, “fui a Buenos Aires por un año para un seminario de un ente llamado ‘Tango Sin Fin’, donde profundicé mucho en el estudio”.
En 2018, junto a unos amigos, formó una banda de rock. “Hicimos un tributo a Memphis, la blusera, y realizamos shows en el auditorio, en el anfiteatro y en casinos”.
Orlando también se dedica a la docencia en la Biblioteca Franklin. “Reiniciamos actividades en marzo. Apenas llegué de Buenos Aires, me conecté con amigos que me dijeron que necesitaban un profesor de piano y acordeón. Preparé a los estudiantes y los inserté en la escuela de música. Ahora son grandes concertistas y profesores de piano. Es un orgullo haber formado a personas que ahora se destacan”.
Tejada también recordó su paso por la Orquesta Típica de San Juan. “Tocamos el piano en un ambiente muy lindo, con algunos altibajos, pero siempre saliendo adelante. Luché y estudié todos los días para estar vigente en mi toque musical”.
Actualmente, junto a Marcelo Gallego Villegas, un guitarrista, estamos trabajando en un proyecto brasileño”, afirmó. “Además, estuve acompañando a un chico que está surgiendo, Lautaro Ortiz, quien ganó en el programa ‘La Ventana’”.
Compartió su faceta como compositor: “Soy compositor y, por inspiración, a veces me surge alguna letra de baladas, boleros y folklore. Últimamente, grabé un chamamé con mis amigos de ‘Los Arrieros Huaqueños’ y estuve en el Tri Chaco del Chaqueño Palavecino en 2012”.
Sobre la actualidad musical, Tejada opinó: “La música ha cambiado muchísimo. Algunos estilos son de calidad y otros no. La música popular bolichera se crea hoy y al mes ya no sirve. A veces, los productores y artistas eligen ritmos mundanos con poca calidad musical y letras vacías”.