Durante 14 y 15 de abril, el Gobierno de la Provincia de San Juan y el Gobierno Regional de Coquimbo, en conjunto con las Cancillerías de Argentina y Chile, retomarán tras 7 años las reuniones del Comité de Integración Paso de Agua Negra. En el país trasandino hay expectativa por los acuerdos a lograr, enfocados en la conectividad.
El gobernador de la Región de Coquimbo, Cristóbal Juliá expresó al diario chileno El Día que “este comité no es solo una instancia protocolar, también es para quienes participamos, una herramienta concreta que nos permite construir acuerdos binacionales, dar seguimiento a compromisos asumidos y proyectar una agenda común de desarrollo”.
Agregó que “este espacio, regulado por el Tratado de Maipú y su reglamento binacional, reúne a autoridades nacionales, regionales, provinciales y locales en torno a comisiones temáticas que abordan temas tan relevantes como infraestructura, turismo, comercio, cultura, recursos hídricos y cambio climático. Para nosotros, es fundamental no solo participar, sino ser protagonistas activos del proceso. Por eso, hemos instruido a nuestros equipos a dar cumplimiento a los acuerdos que se adopten, generar resultados tangibles y preparar desde ya la próxima edición del Comité, que tendrá lugar en nuestra Región de Coquimbo en 2026”.
Uno de los temas que han propuesto desde la Región de Coquimbo “es retomar las conversaciones sobre el proyecto del Túnel de Agua Negra y la EBITAN, en el marco de los grupos de trabajo vinculados a infraestructura y conectividad. Sabemos que este es un proceso binacional, donde cada parte debe estar de acuerdo para avanzar. Por lo mismo, estas serán conversaciones iniciales, un primer acercamiento para conocer visiones, compartir ideas y evaluar juntos qué caminos podríamos explorar hacia una integración física que sea viable y beneficiosa para ambos países”, explicó el gobernador.
“Estamos convencidos de que una integración efectiva generaría mayor inversión, haría a nuestras regiones más atractivas para el capital extranjero y nos permitiría fortalecer la unidad histórica que siempre ha existido entre nuestros pueblos. Tengo fe y esperanza en que primará el diálogo y el sentido de futuro compartido, porque cuando trabajamos unidos, nuestros territorios crecen, se fortalecen y se proyectan con más fuerza al mundo”, precisó Juliá al medio chileno.