Un dramático episodio con final feliz se vivió en el Barrio La Estación. Policías acudieron de inmediato a un llamado de emergencia que reportaba a un bebé de dos meses sin signos vitales. 

Al llegar al lugar, los agentes se encontraron con la desesperación de la madre del pequeño, quien confirmó que su hijo no reaccionaba. Ante la crítica situación, los uniformados no dudaron en iniciar de inmediato las maniobras de reanimación cardiopulmonar (RCP) sobre el lactante.

Los policías tomaron una decisión determinante: trasladar al menor en el propio móvil policial. Durante el trayecto hacia un centro de salud, los agentes continuaron incesantemente con las maniobras de RCP.

Los efectivos le practicaron maniobras de recuperación al pequeño.

En medio del traslado, el bebé reaccionó y comenzó a llorar.  Finalmente, el pequeño fue ingresado en el Centro de Salud René Favaloro, donde fue examinado exhaustivamente por el personal médico. Tras una evaluación completa, se determinó que el bebé se encontraba en buen estado de salud y se decidió mantenerlo en observación para controlar su evolución.

Según el informe médico posterior, el menor habría sufrido una broncoaspiración, una obstrucción de las vías respiratorias causada por el paso accidental de alimentos o líquidos a los pulmones.

Este acto de valentía y profesionalismo fue protagonizado por el Sargento Martínez Mauro, quien conducía el móvil policial, la Agente Silva Soledad, quien actuó como ayudante de patrulla, y los Cabos Lucas Quiroga, motoristas de la base 2, quienes brindaron apoyo en la coordinación y la llegada al lugar.