Con la llegada de julio, los kiosqueros sanjuaninos se preparan para la Semana de la Dulzura, una fecha ya tradicional que, desde hace décadas, combina afecto y consumo. Durante estos días, la costumbre de regalar golosinas, chocolates y bombones no solo fortalece vínculos, sino que también representa una oportunidad clave para repuntar las ventas en un contexto económico desafiante.
Desde los clásicos bombones individuales hasta cajas con surtidos de chocolates premium, las opciones se diversifican cada año y se adaptan a todos los bolsillos. Las marcas lanzan promociones especiales y combos temáticos, y muchos kioscos arman exhibidores con propuestas visuales atractivas para tentar a los clientes.
Los precios varían según la marca, el tipo de producto y la presentación: hay desde golosinas sueltas, hasta cajas con bombones artesanales o importados. Este abanico de posibilidades permite que tanto quienes compran un pequeño gesto como quienes optan por algo más elaborado, encuentren opciones a su alcance.
En un panorama de consumo contenido, la Semana de la Dulzura se presenta como una excusa ideal para dinamizar las ventas en kioscos y almacenes, impulsando la rotación de productos estacionales y generando una conexión emocional con los clientes.
Noticias relacionadas

Detectan 235 cápsulas de cocaína en el estómago de pasajeros con destino a San Juan

A 51 años de su muerte, homenajearon a Perón en Villa Krause

En Barreal, Gendarmería secuestró mercadería sin aval aduanero por un valor de tres millones

Walter, el sanjuanino que emocionó al país en La Voz: “Quería que mi mamá disfrutara todo”
